A lo largo de su carrera, Taylor ha demostrado y conjugado diversas formas de poder de manera exitosa:
Poder de recompensa: Reconoce a sus fans y les da poder al valorar su apoyo. Esto crea una conexión significativa entre ella y su audiencia.
Poder coercitivo: Aunque no es su enfoque principal, se ha enfrentado a empresas poderosas como Spotify y Ticketmaster. Su influencia y talento le permitieron mantener su posición y lograr acuerdos beneficiosos.
Poder legítimo: Taylor es reconocida por su contribución a la sociedad y su impacto en las personas que la admiran. Este reconocimiento le otorga un poder legítimo.
Poder experto: Su conocimiento en la música, los negocios y su habilidad para tomar decisiones estratégicas han sido clave en su éxito como empresaria. Poder referente: Los fans la mencionan en redes sociales, convirtiéndola en un referente para muchos. Su influencia va más allá de la música.
Poder informativo: Al ser el centro de las redes, cualquier cosa que comunique se vuelve atractiva para la gente.
En cuanto a los políticos en Estados Unidos, es interesante que estén prestando atención a Taylor Swift. Su influencia trasciende de la música y se extiende a la cultura y sociedad en general. Necesitamos más mujeres como Taylor en todos los ámbitos de la sociedad.