¿Cuáles son los retos que debe enfrentar un director en el 2023?
Básicamente los retos de siempre, pero en una realidad mucho más compleja.
¿Qué se requiere?
Tres cosas:
En primer lugar humildad para conocernos a nosotros mismos.
En segundo lugar, la curiosidad para investigar el entorno, para emocionarnos e ilusionarnos con hacer cosas distintas, sobre todo con aprender. Recordemos que muchas veces lo difícil no es aprender sino desaprender. “Desaprendemos lo que ya no nos sirve y aprendamos de nuevo”.
En tercer lugar la serenidad que es darse cuenta que la nueva realidad es una realidad cambiante, es una realidad en movimiento.
La nueva estabilidad nos va a pedir que veamos las cosas en movimiento, permanezcamos tranquilos y serenos porque tendremos que cambiar.
Lo más importante es regresar a los orígenes del tema del saber prudencial, al tema de diagnóstico, decisión y ejecución del tema de la planeación.
Con los cambios que hay tan rápidos, sorpresivos y tan disruptivos hacen que la planeación sea a corto plazo.
Continuamente hay que estar diagnosticando, viendo cuáles son tus habilidades, tus capacidades, cuáles son limitaciones y al mismo tiempo revisar el entorno y con eso ir lanzando nuevas estrategias o definiendo nuevos modelos de negocio y después ejecutar.
El tema se ha hecho mucho más dinámico de lo que era, sin embargo, un buen director con su capacidad de análisis, de síntesis, de diagnóstico, de trabajo en equipo, está capacitado para enfrentar estas nuevas realidades.