“Existen tres grandes falsedades que están prevaleciendo en el ambiente y desde las cuales se pueden entender mucho de lo que está ocurriendo a los jóvenes de la actualidad.
La primera gran falsedad es:
La falsedad de la fragilidad expresada en una frase: lo que no te mata te hace más débil.
Lo contrario a lo que siempre se había dicho lo que no te mata te fortalece, sin embargo la mentalidad actual va en sentido contrario, y esto conduce a tratar de evitar todo lo que significa esfuerzo dolor sufrimiento retos, sus situaciones difíciles porque teóricamente esto sería debilidad.
La segunda gran falsedad es:
La falsedad del razonamiento emocional:
Confía siempre en tus sentimientos, es decir déjate llevar por tus emociones, este modo de proceder entendemos tiene consecuencias negativas, porque es una conducta guiada sólo por las emociones, por los sentimientos, por lo regular es una conducta que no tiene un rumbo definido sino que va fluctuando según sus sentimientos van aflorando.
La tercera gran falsedad es:
La falsedad de nosotros contra ellos : la polarización se expresa con esta frase la vida es una batalla entre las buenas personas y las malvadas, es decir no existe un término medio, los que no están conmigo van a ser personas malvadas. Esta polarización se ha potenciado mucho en la sociedad en las últimas décadas.
La fragilidad la mentalidad de evitar el es el esfuerzo, lo duro lo difícil, ir por el camino más fácil y más agradable.
Hoy en día parece que estamos haciendo justamente lo contrario, estamos intentando despejar cualquier cosa que pueda molestar a los niños, esto tiene como consecuencia precisamente la fragilidad.
Cuándo una persona se enfrenta a las situaciones ordinarias de la vida normalmente desarrolla también defensas anticuerpos que le permiten salir adelante, mientras que si hay una sobreprotección fácilmente se crea el debilitamiento.
El término estresores hace referencia a esas circunstancias o esos factores que producen en las personas la necesidad de enfrentar las dificultades con esfuerzo.
Para no deteriorarse necesitamos desafíos físicos y mentales, cuando las personas carecen de esos desafíos se debilitan.
La voluntad que no tiene retos que no se esfuerza también termina siendo una voluntad debilitada, vivimos hoy en día una cultura que se llamado de la Ultra Seguridad, una cultura que es precisamente un culto a la seguridad, por obsesión con eliminar las amenazas, un gran temor a todo lo que no sea seguro, esto va provocando la ausencia de estresores consecuencia del debilitamiento.
La cultura de la Ultra seguridad priva a los jóvenes de las experiencias que en su mente antifrágil necesita y por tanto, se vuelven más frágiles provocando más ansiedad y son más propensos a verse así mismos como víctimas.
La obsesión moderna por proteger a los jóvenes de la sensación de inseguridad es, a nuestro juicio una de las varias causas del rápido aumento de las tasas de puntos de depresión ansiedad y suicidio en los adolescentes.
En la educación de los niños se genera un círculo vicioso en primer lugar está la cultura de la ultra seguridad, hay que sobreprotegerlos para que no enfrenten riesgos eso hace a los niños sean más frágiles y menos resilientes, porque no se les ha permitido desarrollar defensas y capacidades para enfrentar problemas, al ver a los niños más frágiles, se mandan los mayores a protegerlos más, entonces aumentan la sobreprotección.”