El 1 de enero de 1962 The Beatles tuvo su primera audición con Decca Records, de la
cual salieron sin ningún contrato y prácticamente les dijeron que no tenían futuro en la
industria musical, pero cabría cuestionarse si fue la mejor decisión de la disquera.
En vez del director general, quien los entrevistó fue Mike Smith, representando la parte de
búsqueda de talentos. Al parecer recibieron algunos comentarios despectivos de su parte,
como la calidad de sus guitarras o de sus letras. Después de la audición entró otra banda
que se llama Brian Poole and The Tremeloes, por la cual optó Decca Records. La grabación
de la audición de The Beatles llegó a manos de George Martin, el cual notó ciertos
elementos en ellos que podían ser rescatables, y lo demás es historia.
Hay quienes afirman que Decca Records se equivocó al no firmar a The Beatles, pero
habría que preguntarse si se podrían evaluar las decisiones por el resultado; hay
decisiones que toman mucho tiempo para ver materializados los resultados. Otros dicen
que el directivo debió estar presente durante la audición, y no un encargado, aunque otros
afirman que Mike Smith era suficientemente capaz como para delegarle tal
responsabilidad.
Otro punto importante es el proceso de la audición. Si se realizó un primero de enero era
natural que The Beatles estuvieran cansados, además de que se tuvieron que desplazar
desde Liverpool hasta Londres. También cuenta el hecho de que solo les permitieron
tocar tres canciones.
Por otro lado, hay personas que afirman que no firmarlos no fue un error, porque con la
información disponible en el momento no había forma de hacerlo. Se afirma, por ejemplo,
que Paul McCartney estuvo desafinado y que el baterista de aquel entonces no tuvo la
calidad que se esperaba, además de que todos estaban nerviosos. Pero lo que sí es
sumamente cuestionable es que Decca Records nunca se dio la oportunidad de ir a ver
tocar a The Beatles en el bar que lo hacían regularmente.
En nuestras empresas el ejemplo puede ser equiparable a cuando entrevistamos a
alguien para algún cargo en nuestra organización, en el que pedimos mostrar fortalezas y
debilidades, pero no podemos ver en acción a los empleados. Ello tuvieron la oportunidad
y no lo hicieron.
Una buena decisión es aquella que proviene de un buen análisis, en donde se toma en
cuenta la decisión razonablemente disponible porque buscar más información cuesta
tiempo y recursos. Por otro lado, la decisión tomada debe estar alineada con los objetivos.
Otro factor importante es la falacia de la comprensión retrospectiva. Muchas veces
volteamos al pasado y nos parece obvio, pero en su momento no lo era. No porque
parece que es fácil entender el pasado significa que es fácil predecir el futuro.
También hay que tomar en cuenta nuestras intuiciones. Nuestra experiencia va
alimentando nuestro instinto, y este también forma parte del proceso de toma de
decisiones.