El pasado 2 de junio terminó una etapa del proceso electoral, pero al mismo tiempo comienza otra etapa en la vida democrática de México.
La democracia puede estar en transición, sin embargo, toda transición tiene distintas etapas.
Al principio estás en una etapa naciente, empieza a haber derechos y legislaciones, pero posteriormente, a medida que avanza esta etapa, comienza la participación ciudadana, el involucramiento de las personas en la vida pública. Si quisiéramos hacer una analogía en las democracias respecto a la vida humana, podríamos decir que en algún momento la democracia está en una especie de niñez en la cual hay que cuidarla muchísimo y desarrollarla. Esa es la parte del desarrollo de leyes e instituciones.
Existe otra etapa, la adolescencia: ese momento en la vida en el que no estás en la niñez, pero aún no eres adulto. De hecho, la palabra ‘adolescencia’ significa que te falta algo. Así es también la democracia, llega un momento de adolescencia en el que ya ha avanzado mucho, pero aún le falta algo. En este caso, lo que le falta es la participación activa de sus ciudadanos, que nos involucremos en las actividades públicas del día a día.
Quizás te preguntes ¿cómo podemos involucrarnos? Hay múltiples maneras: participando en asociaciones de vecinos, en grupos de seguridad del barrio, en actividades de la escuela de padres o en organizaciones de la sociedad civil en México. Aunque hay pocas de estas organizaciones, necesitan mucho trabajo voluntario porque nuestro país requiere un fuerte apoyo comunitario. Otra forma de participar es seguir de cerca a los gobiernos, gobernantes y políticos para entender sus decisiones y cómo nos representan.
Es un momento para construir la democracia. Construir democracia significa perfeccionar a las personas en el proceso en el que tú también participas. Durante este proceso te desarrollas y te perfeccionas. Es el momento en el que ocurre una gran mezcla entre el desarrollo sistémico de un país bajo un régimen llamado democracia y el perfeccionamiento humano de cada individuo.
Te invito a que construyamos democracia juntos. Aunque el 2 de junio ya pasó, viene una siguiente etapa en el desarrollo democrático de México.